viernes, 17 de abril de 2020

SUMER: "Se creía que el Antiguo Egipto había sido la primera civilización de la Tierra. Sin embargo, no fue hasta entrado el siglo XX, que esta idea se descartaría. Se llevaron a cabo importantes descubrimientos sobre Mesopotamia, lo que condujo a serios debates entre los historiadores".


SUMER: EL INICIO DE MESOPOTAMIA

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e creía que el Antiguo Egipto había sido la primera civilización de la Tierra. Sin embargo, no fue hasta entrado el siglo XX, que esta idea se descartaría. Se llevaron a cabo importantes descubrimientos sobre Mesopotamia, lo que condujo a serios debates entre los historiadores.

En el valle bajo de los ríos Tigris y Éufrates, existió Sumer, un país al que se le acredita una sofisticada organización social y política, la cual había desarrollado un ordenamiento jurídico. Las excavaciones efectuadas dieron lugar al desenterramiento de diversos objetos, entre ellos, tablillas de arcilla con escritura cuneiforme, que narran acontecimientos de la vida de los habitantes sumerios.

A pesar de la abundancia de tablillas, que, a su vez nos han permitido conocer la historia de esta civilización, cabe mencionar que no existe comparación con los grandes hallazgos de Egipto, mucho más ricos, en este aspecto.

Se piensa que los primeros pobladores pertenecían ya a la especie Homo Sapiens y se establecieron en las montañas del norte de Irak. En este período de pre-civilización, conocido como El Obeid, surgieron ciudades como Eridu, Ur y Uruk. Sería alrededor del 3500 a. C., que aparecerían los sumerios al sur de Mesopotamia.

Se desconoce de dónde vinieron estos hombres, ya que los hallazgos arqueológicos resultan insuficientes para responder a esta interrogante, y establecer con claridad, su origen. Como “Época de Uruk” se le conoce al período de su asentamiento en la región, donde tuvo lugar el surgimiento de la escritura cuneiforme, años más tarde.

Lamentablemente, no se cuenta con el conocimiento total sobre la información contenida en los pocos escritos encontrados, por lo que el desciframiento de estos es casi impenetrable y, en consecuencia, muy pocos datos sobre ellos.

La historia de Sumer tiene su apogeo una vez culminada la Época de Uruk, abriendo paso a la “Época Protodinástica” que abarcó de los años 2700 a 2300 a. C. Aquí, la organización se conformaba por ciudades-estados, cuyos centros espirituales eran el Palacio Real y el Templo. Ambas construcciones se situaban junto al Zigurat, que era una edificación piramidal en varios niveles, que simbolizaban la conexión de la divinidad con la humanidad.

Durante este tiempo, surgieron conflictos entre las distintas ciudades-estados por el control y el predominio, dando lugar a que, al final de la Época Protodinástica, Sumer se viera bajo el dominio de un solo Rey. No obstante, no sería hasta la llegada de Sargón de Acad que se instauraría un poderoso Imperio.

La conquista fue posible gracias al manejo del arco por parte de los semitas, quienes no tuvieron dificultad para doblegar a los antiguos sumerios, que, si bien eran guerreros, estaban acostumbrados al combate cuerpo a cuerpo; por lo que fueron superados y no pudieron contrarrestar el ataque.

Sargón estableció su dominio sobre los sumerios, extendiéndose sobre Mesopotamia. Al Este, hasta Elam; y al Oeste, a Siria y Asia Menor. Con él empezaría el Período Acadio, o como también se le conoce: “Primer Imperio Mesopotámico”, durante dos siglos; hasta que el pueblo de los gutu, provenientes de Kurdistán, lo derrocó.

Ante esto, tuvo que ser hasta antes del 2000 a. C. que resurgiera la civilización de Sumer, debido al florecimiento de la ciudad de Ur. En esta etapa, la cultura sumeria se extendió en todo el próximo Oriente; lo cual, tampoco duró mucho a raíz de la invasión de los semitas amorreos, bajo el control de Hammurabi que, en 1750 a. C., estableció el Imperio Semítico de Babilonia, llegando a su fin, la historia de Sumer.


“El conocimiento habla
y la sabiduría escucha”
(Jimi Hendrix, 1942-1970).