jueves, 28 de mayo de 2020

LA COMIDA: "La conciencia es parte fundamental del proceso de digestión, por lo que se recomienda no tomar un bocado hasta que hayamos ingerido el anterior. Masticar adecuadamente permite desatar el sabor y sentirlo plenamente. El uso del resto de nuestros sentidos juega un rol importante en esto".


LA COMIDA: UN TEMA SOBRE LA MESA 

I

ndependientemente de que la comida tiene como función principal un aspecto fisiológico, también conlleva distintas connotaciones, ya sea como motivo de celebración, trabajo, reuniones o simplemente por disfrutarse. Lamentablemente, por el corto tiempo del que muchas veces se dispone, el espacio para ella también se ve afectado. 

Vista como un mero trámite, la comida diaria se ha convertido, para muchos, en solamente eso. Algo que, sin duda, es completamente erróneo, ya que por desgracia mucha gente alrededor del mundo carece de la tranquilidad suficiente, de que al día siguiente tendrá algo para consumir. Contrastando con los que dicen: “como, porque tengo que comer”, dejando de lado el disfrutarla. 

No sólo el sentido del gusto es el indicado para gozar de los alimentos. El uso del resto de nuestros sentidos juega un rol importante en esto. El olor, la textura y la apariencia, acompañan al sabor, con el que puede obtenerse un momento de placer. 

Suele pasar que llegamos a comer de forma automatizada hasta llegar al hartazgo o, en su defecto, a dejar de hacerlo con tal de no rebasar nuestro peso. En uno u otro caso, nos encontramos ante trastornos alimenticios. 

En ocasiones, el comer se convierte en una tarea complicada e incorrecta, adoptando posturas que desconectan, en su totalidad, de lo que sería un momento destinado para una actividad importante para el cuerpo. Ya sea de pie, caminando, en el escritorio, por ejemplo, en donde nuestra atención se orienta hacia otras actividades, desatendiendo el hábito de alimentarse bien y actuando mecánicamente. 

La conciencia es parte fundamental del proceso de digestión, por lo que se recomienda no tomar un bocado hasta que hayamos ingerido el anterior. Masticar adecuadamente permite desatar el sabor y sentirlo plenamente. 

La medicina tradicional de la India (Ayurveda), afirma que son seis el número de sabores principales: dulce, salado, ácido, amargo, picante y astringente. De acuerdo con la Ayurveda, la combinación de los seis sabores es lo recomendable para una dieta sana, ya que, si se inclina por alguno en específico, pudiera darse el caso de crear algún tipo de desequilibrio en el organismo. 

La comida nos provee de la energía necesaria para funcionar bien, pero al activarse los sentidos podemos oler y saborear, lo que se convierte en algo placentero, que en ocasiones puede llegar a ser contraproducente, por la adicción que pudiera presentarse al tornarse irresistible. 

Por eso la importancia de la buena alimentación, bajo el concepto de nutrir al cuerpo, ya que esto, al ir más allá de esta simple función fundamental, puede desvirtuarse al caer en los excesos y repercutir de forma negativa en la gente. 

Tal es la importancia de los hábitos alimenticios, que debe concedérsele el tiempo necesario para tan significativa actividad, y así tener la oportunidad de disfrutar y aprovecharla. Aunque no siempre se pueda comer en familia, bien puede hacerse el intento de que las buenas costumbres no se pierdan. 

Recordemos, pues, que el momento de los alimentos debe ser especial, atendido al máximo, buscando siempre lo saludable y transformarlo en una delicia. 

 

“El conocimiento habla
y la sabiduría escucha”
(Jimi Hendrix, 1942-1970).