Levi Strauss |
JEANS: EL ORIGEN DE LOS PANTALONES VAQUEROS
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n todo guardarropa, nunca podrá faltar
un par de jeans; los cuales son de uso común, por la comodidad y versatilidad
con las que se pueden combinar. Lo importante es que nunca pasan de moda y
siempre son una buena alternativa para vestir. Ya sean modelos para hombre o
mujer, esta prenda tiene su historia como todo en esta vida.
Desde su invención, ha surgido una
amplia gama de estilos y marcas, a través de los años; los cuales, han acarreado
popularidad en todos los sectores de la población. Desde el típico modelo para
el trabajador minero, que necesitaba la resistencia para el trabajo arduo, así
como los “vaqueros”, quienes, con estos pantalones, cubrían sus
necesidades de estar por horas cabalgando, cuidando el ganado.
Hoy
en día, son sinónimo de “confort” para quien los utiliza; desde niños
hasta adultos mayores. Todos son consumidores. Se han convertido en los
preferidos de muchas personas. Sólo basta combinarlos con una prenda superior y
un calzado apropiado, para sacar un mejor provecho de ellos.
A
pesar de ser considerados “informales”, depende del estilo propio para
potenciar la elegancia; desde acompañarlos con un saco, o bien, con una
camiseta o blusa estampada. Todo depende del ingenio y el deseo de obtener las
mejores prestaciones de los jeans.
La
tela con la que son elaborados, se le conoce como “mezclilla” o “denim”,
misma que tiene su origen en la población sureña de Francia: Nimes. Con
propiedades de firmeza y grosor, fue muy común en el siglo XVII en Europa.
No
fue hasta 1873, que en los Estados Unidos fueron patentados por Levi Strauss y
Jacob Davis; en un intento por fabricar pantalones para trabajo rudo,
añadiéndoles remaches de cobre, para ofrecer resistencia en los puntos más
vulnerables de la prenda.
Así
nació Levi Strauss & Co., la marca a la que le es atribuida
el origen de tan popular indumentaria, y que actualmente se mantiene vigente en
los distintos comercios a nivel mundial. Han surgido compañías que han buscado
competir, innovando variedad de estilos muy diferentes a los modelos clásicos y
originales, como los de corte recto y los de ajuste para botas.
La
tela con la que en un principio se elaboraban, era de color azul, obteniendo
sus variantes por medio de prelavados, para así lograr matices, de modo que los
clientes tuvieran opciones para elegir entre un tono fuerte y uno claro.
En
la actualidad, no sólo encontramos los típicos “blue jeans”, sino que,
además, se comercializan en casi todos los colores, para el gusto y personalidad,
acorde al consumidor.
“El
conocimiento habla
y la sabiduría
escucha”
(Jimi Hendrix, 1942-1970).