viernes, 9 de abril de 2021

LA CARLOTA: "Este postre era muy diferente a como hoy se le conoce. Inicialmente, era una receta para el horno a base de trozos de pan y salsa de frutas. Tiempo después se volvería un postre frío, exclusivo de la alta sociedad por lo costoso que el transporte de hielo suponía en la época".


LA CARLOTA: UN POSTRE CON GALLETA HISTÓRICA 

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n medio de una profusa variedad de ingredientes y modos de preparación, un postre de singular historia es la Carlota. Alrededor del mundo y a través del paso de los años, ha adoptado distintas versiones, al igual que traducciones de su nombre a la lengua local, lo que en conjunto ha hecho imposible establecer su origen en concreto, siendo Francia, Inglaterra y Rusia los países que se alzan como los candidatos principales. 

Es posible que su nombre derive de la duquesa alemana Carlota de Mecklemburgo-Strelitz, de la zarina Carlota de Prusia, o bien de la princesa Carlota Augusta de Gales, como un modo de rendirles homenaje. Lo cierto es que fue el famoso y destacado gastrónomo francés, Antonin Carême, quien, con sus vastos conocimientos de la alta cocina, llegó a ser chef no sólo de Napoleón Bonaparte —sino del rey Jorge IV del Reino Unido y del zar Alejandro I de Rusia—, atribuyéndosele el crédito de dicha invención. 

Este postre, en sus inicios, era muy diferente a como hoy se le conoce. Inicialmente, la Carlota era una receta para el horno a base de trozos de pan y salsa de frutas. Tiempo después se volvería un postre frío, exclusivo de la alta sociedad por lo costoso que el transporte de hielo suponía en la época, al no existir refrigeradores y neveras como en la actualidad. 

En algunas regiones, hablando principalmente de México, la Carlota se elabora con una serie de ingredientes económicos y accesibles: galletas “María”, leche condensada, leche evaporada, ralladura y jugo de limón, así como fruta en almíbar o fresca para decoración. 

A propósito de la galleta “María”, debemos remontarnos al año de 1874 para comprender su origen. Una empresa de repostería fue la encargada de su elaboración con el propósito de honrar a la duquesa María Aleksándrovna de Rusia, quien contrajo nupcias con Alfredo Alberto, duque de Sajonia-Coburgo y Gotha. La galleta, de forma redonda, se caracteriza por llevar el nombre “María” grabado en una de sus caras. 

El proceso de elaboración de la Carlota es simple. Consta de sobreponer, en un recipiente, camas individuales de galletas, mismas que serán cubiertas por la mezcla, previamente batida, del resto de los ingredientes (las leches y el jugo de limón); completando cama por cama, hasta llegar a la altura deseada, y así terminar decorando la superficie con la ralladura de limón y la fruta. 

A continuación, el recipiente deberá ser llevado al congelador por un lapso mínimo de dos horas. Se sirven rebanadas con el acompañamiento de la bebida preferida. Existen variantes de la receta, las cuales pueden ser más sofisticadas por añadirles otros ingredientes, como queso crema, grenetina, chocolate, etc. Todo dependiendo de su creador. 

La Carlota es un postre muy dulce que se disfruta en cualquier ocasión. 

 

“El conocimiento habla
y la sabiduría escucha”
(Jimi Hendrix, 1942-1970).