E
|
n las mesas de las familias mexicanas,
nunca puede faltar, un fruto que acompaña a una gran cantidad de comidas. Nos
hace disfrutar cada bocado, cuando combinamos una porción con una rebanada de “Aguacate”.
Con
su sabor característico y con una gran variedad, desde el “criollo”
hasta llegar al “Hass”, ya sea en guacamole o simplemente en rebanadas;
el aguacate tiene un lugar privilegiado y ha asegurado, su presencia, dentro de
la muy conocida gastronomía nacional.
Aunque,
actualmente, se produce en distintos países alrededor del mundo, este fruto es
considerado mexicano, de los cuales se han derivado diferentes tipos, que hacen
la delicia de todos. Conocido por su nombre científico, Persea americana, prácticamente, es conocido en todo el orbe y, se
reconoce a México, como el principal productor y exportador a nivel mundial.
Podemos
decir, que el aguacate se produce en el noventa por ciento del territorio
nacional, en diferentes tipos; aunque, el considerado de exportación y de mayor
calidad se produce en las Entidades de Michoacán, Jalisco, Nayarit, Morelos y
el Estado de México.
Seguir
describiendo al aguacate, es una invitación a degustarlo cada vez que exista la
posibilidad de hacerlo. A mi juicio, e independientemente del típico
“guacamole”, el aguacate es el acompañante perfecto para todo; desde un
emparedado, hasta llegar a los finos cortes de carne, sin olvidarnos de los
tradicionales antojitos y de los pescados y mariscos.
Dentro
de su composición, el aguacate es una fruta con un alto contenido de vitaminas
y minerales, tales como, grasas, carbohidratos, fibra, calcio, hierro,
magnesio, potasio, fósforo, vitaminas A, C, E, K, y B3, aparte de su contenido
de agua y proteínas, lo que lo hace un producto con un considerable valor
nutrimental.
Pero,
ya basta de tantos datos e información al respecto. Lo que a la mayoría nos
interesa, es saber sobre alguna preparación que tenga que ver con este “súper
fruto”. Por esa razón, les comparto una receta de guacamole, que posiblemente,
ustedes ya conozcan; simplemente es una versión con los ingredientes que se
producen en mi localidad.
GUACAMOLE
CON MANGO (Para cuatro personas)
Ingredientes:
+
Tres o cuatro aguacates grandes.
+
Un mango manila o petacón, cortado en cuadritos.
+
Un tomate, cortado en cuadritos.
+
Una cebolla mediana, cortada en cuadritos.
+
Cuatro chiles serranos en rodajas.
+
Cilantro de rancho, finamente picado.
+
Jugo de un limón.
+
Pimienta al gusto.
+
Sal al gusto.
+
Aceite de oliva.
Preparación:
Ante
todo, la higiene es primero, por lo que hay que lavar muy bien los vegetales
antes de utilizarlos. Ya que tenemos nuestros ingredientes limpios y
desinfectados, empezaremos por pelar los aguacates y retirarles la semilla.
Acto seguido, los vaciamos en un molcajete o en el recipiente que tengamos,
junto con la cebolla, el chile serrano, la sal, la pimienta y el jugo de limón,
para así dar inicio al proceso de machacar el contenido.
Una
vez realizado lo anterior, se le puede agregar un chorrito de aceite de oliva,
lo equivalente a dos o tres cucharadas soperas (opcional), para después agregar
el tomate y el mango, para así, revolverlo y unificarlo todo con un tenedor.
Cabe mencionar que, tanto el tomate y el mango, se incorporan al final, debido
al gran contenido de líquido que contienen, por lo que no se deben de machacar.
No olvides refrigerarlo por unos minutos.
Y
así, obtenemos nuestro guacamole, listo para ser servido, ya sea, simplemente
con totopos, o en unas tostadas de camarón, o bien, con una buena carne asada;
en fin, como a ti te apetezca, lo importante es disfrutar de las maravillas del
aguacate.
Pues
ya lo saben, a consumir los productos nacionales, que de esos tenemos muchos.
Espero y tengan la oportunidad de realizar esta receta, que no es propia, pero
que en muchos lados, se ofrece, y que la diferencia resalta en el toque que uno
le imprima. ¡Buen provecho!
“El conocimiento habla
y la sabiduría
escucha”
(Jimi Hendrix, 1942-1970).