CAFÉ: EL ARRANCADOR DE NUESTRA VIDA
P
|
osiblemente, una de las mayores
aficiones de las personas en el mundo, sin duda alguna es beber café. Ya sea,
puro o instantáneo, normal o descafeinado o en las diferentes versiones que podamos
encontrar. Esta bebida ha sido por mucho tiempo, un buen acompañante en nuestra
vida. En el desayuno es básico y en el transcurso del día, se puede disfrutar a
cualquier hora, pero siempre con moderación.
Pero,
¿nos hemos puesto a pensar en los beneficios que nos aporta? Quizá, antes no
nos hayamos planteado esta pregunta; o ni siquiera nos pudiéramos imaginar, lo
importante que puede llegar a ser, al disfrutar nuestra bebida favorita del
diario.
Al
recomendarse no beber el equivalente a más de cinco tazas al día, podemos decir
que tenemos la facilidad de dejarnos llevar por el sabor y el gusto de
disfrutarlo, además de lo beneficioso de sus componentes.
Para
empezar a describir lo benéfico del café, tenemos que resaltar los
antioxidantes y a la cafeína, que actúa como estimulante del sistema nervioso,
por lo que en la mañana, funciona como “arrancador” y ayuda a activarnos,
eliminando la sensación de somnolencia.
Una
de las principales cosas a favor del café, si no es que la más importante, es
la de que se considera, que ayuda a reducir el riesgo de algunos tipos de
cáncer.
La
cafeína es considerada como una gran ayuda para bajar de peso, por ser una
sustancia que favorece a la quema de grasa, aumentando la adrenalina; lo que
resulta en un mejor rendimiento físico, deshaciendo la grasa corporal.
Debemos
agradecer al café, que nos ayuda a mejorar nuestra actividad cerebral,
incrementando el nivel de dopamina y noradrenalina; lo que repercute a favor en
nuestra memoria y cognición, a tener buena energía, alto estado de ánimo y a
evitar distracciones.
El
riesgo de contraer enfermedades en general, pueden ser prevenidas en un buen
porcentaje, con la ayuda de esta bebida. Ejemplos: diabetes, depresión,
cirrosis y neurodegenerativas como el mal de Parkinson o el Alzheimer.
Debemos
tomar en consideración que una taza de café puede proporcionarnos nutrientes
esenciales como antioxidantes, magnesio, niacina, potasio y vitaminas B2 y B5.
Por
este motivo, siempre habrá un buen pretexto para invitar a alguien a tomar una
taza, pero ahora, ya sabremos que independientemente de la buena compañía, le
estaremos haciendo un gran favor a nuestro organismo.
“El
conocimiento habla
y
la sabiduría escucha”
(Jimi Hendrix, 1942-1970).