PLACEBO: EL ENGAÑO A LA MENTE
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xisten formas de hacer que nuestro
cerebro procese algún tipo de sensación errónea, cuando es sometido a ciertas
sustancias y/o medicamentos; provocando un efecto dependiendo del producto
ingerido, haciendo sentir alivio y relajación. A esto se le conoce como “Efecto Placebo”.
Tratándose
de “medicamentos”, se le denomina “placebo” a las sustancias que no tienen
la característica de curar, pero que producen un efecto como si lo tuviera. A
raíz de que el enfermo las ingiere, se convence de que son medicamentos
poderosos, no siendo más que productos farmacológicos inertes, con la apariencia
y forma de medicina convencional.
Se
puede decir que la finalidad de los placebos, es producir un efecto positivo en
la salud de un paciente al serle administrados; con base en la confianza y en
la fe como principal motivación.
En
la mayoría de los casos, por no decir que en casi todos, el paciente desconoce
lo que en realidad está tomando. El enfermo cumple con la administración de sus
medicamentos en las dosis y horarios recomendados, hasta sentirse completamente
bien, todo gracias al efecto de alivio obtenido por lo ingerido.
La
sugestión es la principal actriz dentro de las terapias, en donde se involucran
estos medicamentos inactivos. Basta con hacer creer al individuo que los tomará,
que al poco tiempo de ingerirlos notará una mejoría en su organismo; por lo que,
debe tomarlos, siguiendo las instrucciones de quienes se los recetaron.
Por
este motivo, es importante dejar pasar un tiempo considerable, antes de
informar al paciente, de lo que realmente tomó, para que no desaparezcan los
efectos del placebo, y pueda “recaer”
en la enfermedad.
Uno
de los principales campos de acción de los placebos es la “medicina no convencional”, en donde la gran variedad de productos
de origen natural, como son las infusiones, provoca el efecto de curación; por
lo que se demuestra, que la creencia en tales productos sugestionan al
paciente, haciendo que su mente acepte las condiciones del tratamiento.
No
sólo podemos experimentar este efecto en medicamentos, también se puede lograr
en otras cosas, como lo son bebidas “alcohólicas”.
Esto es más propenso a sufrirlo la gente que no es muy afecta al consumo de
alcohol, debido a que no pueden llegar a distinguir fácilmente la diferencia
entre una bebida con grado alcohólico, con otra que no lo tiene; llegando a
sentir los efectos y a comportarse como si experimentaran signos de ebriedad,
delatándose en el razonamiento, forma de hablar y de pensar.
No
cabe duda que el poder de la mente es tan grande, logrando cosas impresionantes
a través de la fe. Cabe mencionar, que esta técnica se ha utilizado por cientos
de años, desde antes de la medicina moderna. Los curanderos de las poblaciones
indígenas, sanaban a los enfermos de esta manera, por lo que, no hay de qué
sorprenderse en este mundo tan innovador.
“El
conocimiento habla
y la sabiduría
escucha”
(Jimi Hendrix, 1942-1970).