viernes, 10 de abril de 2020

LA MANDRÁGORA: "En esta obra, Maquiavelo manifiesta su pensamiento político, incapaz de confiar en la nobleza y rectitud del ser humano; quien, para él, siempre terminará desviándose del camino de la virtud en pro de sus propios intereses, bajo su famosa consigna: 'cualquier fin justifica los medios'".


LA MANDRÁGORA: COMEDIA MAQUIAVÉLICA

U
na de las obras más sobresalientes del siglo XVI y de la historia del Teatro Italiano, es la Comedia escrita por Nicolás Maquiavelo (Niccolò Machiavelli) en el año de 1518: “La Mandrágora”; en la cual, plasmaba y representaba el contexto de vida del pueblo de la Florencia de aquellos años.

La trama está basada en un joven italiano de 30 años, aproximadamente, de nombre Calímaco, radicado en la ciudad cosmopolita de París, donde se desarrollaba como estudiante y emprendiendo negocios que beneficiaban para el gusto de sus diferentes placeres.

La razón de su estancia en Francia se debía a la decadencia y a las continuas guerras que en Italia prevalecían, por lo que emigró de su tierra florentina buscando seguridad. Sin embargo, un día decide regresar a su pueblo sin importar las condiciones imperantes, sólo para ver a una mujer.

Previamente, antes de emprender el viaje, en una discusión con otro florentino se puso de manifiesto la comparación de la belleza de las mujeres italianas y francesas. Su interlocutor destacó a una en especial: Lucrecia; motivo por el cual, Calímaco, decidido a comprobar esto, viajó inmediatamente rumbo a Italia.

Resultó que Lucrecia, era una mujer casada desde hacía 6 años. Esposa de Nicias Calfucci, un hombre al que la mayoría consideraba un necio y sin gracia. Calímaco, al llegar a su destino, se percata que lo dicho por su conocido era verdad, quedando deslumbrado por la mujer.

A pesar del tiempo de casados de la pareja, no habían podido concebir un hijo, algo que deseaban con mucho ahínco; por lo que acudían a médicos con tal de lograr el objetivo, siguiendo minuciosamente sus indicaciones. Aprovechando las circunstancias, Calímaco orquestó un plan apoyándose de Ligurio —un conocido vividor—, de Siro —un sirviente de la casa de Nicias— y de Fray Timoteo —un fraile hipócrita—, para llegar hasta Lucrecia.

Ligurio le sugiere a Calímaco que se presente ante la pareja como un famoso médico francés, recetando un poderoso brebaje hecho a base de mandrágora, el cual sería capaz de curar a Lucrecia de la imposibilidad de concebir hijos; presumiendo que, gracias a sus habilidades médicas, todas las nobles de Francia han tenido hijos sin ningún impedimento, incluyendo a la reina. Por su parte, Nicias argumentaba que el mal debía recaer forzosamente en su mujer, al autodescribirse como el hombre más viril de toda Florencia.

Calímaco, ya en el papel de ‘médico’, les sugiere que la poción tendría que ser tomada esa misma noche, sólo que les advierte de un ‘inconveniente’. El primer hombre que tenga contacto carnal con Lucrecia morirá al cabo de ocho días. Nicias, aterrado, no aceptó de buena forma las condiciones, por lo que preguntó si existía alguna alternativa para no morir. En respuesta, se llegó a la conclusión de que alguien tenía que tomar su sitio y sacrificarse en su lugar. Para ello, decidieron secuestrar al primer varón que encontraran, y a punta de golpes, amordazarlo para conducirlo a la casa de Lucrecia.

Así pues, los hombres se dispusieron a recorrer Florencia para localizar a su víctima, hasta que finalmente la hallaron y la atraparon, conforme al plan. Pero lo que Nicias no sabía, era que la ‘víctima’ era el propio Calímaco, quien lo había planeado todo desde un principio con ayuda de sus secuaces. Previamente, pusieron al tanto a la madre de Lucrecia que, con la ayuda del fraile, la convencieron de aceptar el tratamiento; a lo que la muchacha se negaba en un inicio, pero ante tanta insistencia terminó por acceder.

Finalmente, Calímaco consiguió lo que buscaba. Cuando se presentó ante Lucrecia le reveló el engaño y cómo todo lo planeó por amor a ella, a lo que la susodicha le respondió que, al ser una idea de su marido, avalada por su confesor y por su madre, lo tomaba como parte de un ‘designio celestial’, al cual no podía negarse, aceptando a Calímaco como amante desde ese momento en adelante.

El desenlace se deja a la imaginación del espectador, ya que, a la mañana siguiente, Nicias decide proponer al ‘médico’ Calímaco como su compadre, a petición de Lucrecia, en modo de agradecimiento; por lo que le hace entrega formal de las llaves de su casa para que entre y salga cuando le placiera. Sin duda, Lucrecia quedará embarazada, por lo que ‘asegurará’ el linaje de Nicias, quien nunca sospecharía de la infidelidad.

En esta obra, Maquiavelo manifiesta una vez más su pensamiento político, incapaz de confiar en la nobleza y rectitud en el ser humano; quien, para su consideración, siempre terminará desviándose del camino de la virtud en pro de sus propios intereses, bajo su famosa consigna: “cualquier fin justifica los medios”.


“El conocimiento habla
y la sabiduría escucha”
(Jimi Hendrix, 1942-1970).