sábado, 11 de abril de 2020

NEUMÁTICO: "Es bueno contar con equipo de señalamiento de precaución; tener en buenas condiciones el neumático adicional; tener la llave de tuercas adecuada y revisar las condiciones de todos los neumáticos, para salir con más confianza y seguridad, y así evitar algún tipo de accidente".



CAMBIO DE NEUMÁTICO: UNA PEQUEÑA AYUDA

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iempre estaremos expuestos a imprevistos durante nuestra vida diaria, desde levantarnos tarde al no escuchar el despertador, hasta olvidar el encargo de pagar las cuentas. Pero, ¿qué sucede cuándo se nos avería un neumático de nuestro auto? Está demostrado que no todos los dueños de vehículos cuentan con la habilidad para cambiarlo.

Esperemos que esto no nos suceda pronto, pero en caso de ser así, más vale estar preparados, o al menos, tener nociones de lo que debemos de hacer para resolver nuestro problema y no frustrarnos en el intento.

Primeramente, debemos elegir un buen lugar para interferir lo menos posible a los demás, colocando señalamientos luminosos que avisen de que existe un problema con un vehículo más adelante, además de encender las luces intermitentes o de emergencia.

A menos que el vehículo cuente con neumáticos especiales de los llamados “run flat”, no se necesitará uno de refacción. En caso contrario, siempre será obligado contar con uno de auxilio, además de la herramienta necesaria para realizar el cambio.

Ya con una ubicación en un buen sitio, se procede a retirar los tapones o tapacubos de la rueda, en caso de tenerlos. Se empleará la “llave de cruz” para aflojar las tuercas de la rueda. No hay que olvidar que se recomienda aplicar el freno de estacionamiento y colocar algún objeto en alguno de los otros neumáticos, a manera de tope, para así evitar algún incidente por el movimiento al imprimir la fuerza con la llave de cruz.

Una vez retiradas las tuercas, es el turno del “gato” mecánico, el cual debe colocarse en el sitio correcto (todos los vehículos tienen un sitio de anclaje, por lo que habrá de localizarlo). Es cuando llega el momento de “levantar” el auto, hasta la altura que permita maniobrar y retirar el neumático dañado.

Se tiene que colocar el neumático de repuesto, haciendo coincidir los agujeros de la rueda con los tornillos. Se recomienda colocar alternadamente (en forma de estrella) para de esta forma ejercer una presión lo más uniforme posible sin apretar al cien por ciento.

El siguiente paso es bajar el auto lentamente. Ya en el suelo hay que asegurar que todas las tuercas estén muy bien apretadas, ejerciendo un poco más de fuerza, aprovechando la estabilidad que da el terreno, en comparación de cuando está levantado.

Con estos sencillos pasos, en cuestión de minutos se resuelve un problema; con lo que se puede ahorrar algo de dinero al llamar al servicio.

Como recomendaciones adicionales, es bueno contar con equipo de balizaje y señalamiento de precaución; tener en buenas condiciones el neumático adicional con la presión de aire necesaria; tener la llave de tuercas adecuada para el vehículo y, por último —y no menos importante—, es verificar que se cuenta con todo lo anterior y revisar las condiciones de todos los neumáticos, para salir con más confianza y seguridad, y así evitar algún tipo de accidente.


“El conocimiento habla
y la sabiduría escucha”
(Jimi Hendrix, 1942-1970).