lunes, 25 de mayo de 2020

MUEBLES DE EXTERIOR: "Para elegir el tipo de muebles para el exterior, hay que tomar en cuenta lo siguiente: analizar lo que se necesita en base al espacio con el que se cuenta; tomar en consideración la resistencia y peso de los muebles. Todo en base al buen gusto".


MUEBLES DE EXTERIOR: INTELIGENCIA AL ELEGIR 

C

ada parte de nuestro hogar es importante y, merece una especial atención, cuando de ambientar se trata. Al momento de escoger los artículos que estarán destinados a llenar los espacios, debemos tomar en cuenta todos los detalles para así lograr el atractivo y la comodidad deseada. 

El mismo cuidado debe tenerse en la sala que en la cocina, en la recámara que en el baño, y así en cada pieza del hogar. Pero no menos importante es el área exterior, donde se puede aplicar el mismo esmero, con tal de que todo el hogar luzca especial, a nuestro gusto, y refleje nuestra personalidad. 

Para las zonas de la terraza y del porche, existen diferentes tipos de muebles que se ajustan a los presupuestos de cada uno, en variados materiales, colores y estilos; en donde sólo hay que saber escoger el acorde a nuestra decoración, personalidad y tipo de construcción con la que se cuente. 

Ya sean sillas reclinables y ajustables, mecedoras, mesas de centro, mesas de comedor plegables o bancos de madera, por mencionar unos, son algunas de las opciones para embellecer las áreas en cuestión. Los muebles se pueden fabricar en madera, fibras naturales, resinas, hierro y aluminio. Cada uno de estos materiales tiene algunas ventajas y desventajas, por lo que habrá que atender bien a las necesidades propias. 

La madera siempre dará el tono de calidez para cualquier espacio, pero hay que tomar algo en consideración: algunas no son aptas para soportar el sol y la lluvia. En este caso se recomiendan muebles de madera tratada y, si no, proporcionar a las primeras, el mantenimiento adecuado para su duración (limpieza, barnizado, pintado, etc.). 

Las fibras naturales son una de las opciones más tradicionales que se pueden apreciar en muchos hogares. A pesar de ser un material delicado, el mimbre y el ratán se han hecho populares. Los diseños son muy confortables y llamativos. El principal inconveniente es que deben permanecer bajo techo, suelen ensuciarse mucho y no duran toda la vida. Para mantenerlos hay que limpiarlos y barnizarlos una vez al año. 

Por la practicidad y ergonomía, no hay quien pueda superar a los muebles fabricados a base de resinas. Ideales para el jardín, ya que resisten el sol y la lluvia; no se deforman, son ligeros y apilables, además de ser muy accesibles, económicamente hablando. Tienen el inconveniente de que pueden romperse y perder el color si es que son de baja calidad. El mantenimiento que requieren es simple, basta limpiarlos con agua y jabón. 

Los muebles, a base de hierro, siempre darán un toque de elegancia clásica al exterior de la casa, por lo que el jardín siempre agradecerá contar con ellos, salvo por el óxido que con la humedad se forma. Lo mismo sucede con los de aluminio fundido, que simulan a los fabricados en hierro, con la ventaja de no presentar oxidación, contrastando con el valor más alto con respecto a los primeros. 

La ventaja del hierro es que es resistente al sol y hay muchos diseños. Se tiene que aplicar un tratamiento antioxidante para el mantenimiento y pintarlos cuando se requiera. Por su parte, el aluminio no se oxida, son ligeros y resisten la intemperie. El inconveniente es el costo, que bien se puede comparar con los de madera fina. Su mantenimiento es sencillo, a base de agua y jabón. 

Para elegir el tipo de muebles para el exterior, hay que tomar en cuenta lo siguiente: analizar lo que se necesita en base al espacio con el que se cuenta; tomar en consideración la resistencia y peso de los muebles. Todo en base al buen gusto. 

 

“El conocimiento habla
y la sabiduría escucha”
(Jimi Hendrix, 1942-1970).