martes, 2 de junio de 2020

COMALA: "No importa desde qué punto nos encontremos, siempre será posible vislumbrar el majestuoso Volcán de Fuego. Visitar la tierra de los volcanes es más que estar cerca del “fuego”, dada la diversidad de actividades que lo hacen un sitio privilegiado para la aventura".


COMALA: EL PUEBLO BLANCO DE AMÉRICA 

N

o importa desde qué punto de Comala nos encontremos, siempre será posible vislumbrar el majestuoso Volcán de Fuego. Esta estructura geológica —al igual que el Nevado de Colima—, se ha convertido en uno de los sellos distintivos de este Estado mexicano del mismo nombre, considerado de los más pequeños de la República. 

En los últimos años ha estado bajo observación, debido a que se trata de uno de los volcanes activos, asunto que no deja de causar preocupación a los municipios aledaños de Cuauhtémoc y Comala (Colima), así como Tonila, Tuxpan y Zapotitlán, en el vecino Estado de Jalisco. 

Ubicado en el norte del Estado, Comala posee un gran atractivo, lo que lo ha hecho merecedor a ser elevado a la dignidad de “Pueblo Mágico”, a raíz de su aire campirano y típico que le han dado reconocimiento y realce internacional, disfrutado por turistas nacionales y extranjeros. También es conocido como “El Pueblo Blanco de América”, debido a que en su arquitectura este color se destaca. 

Algo muy característico son sus “centros botaneros”, sitios en donde se puede comer acompañado de los ponches de la región, amenizado por diferentes grupos de mariachi, dando ambiente al establecimiento. Lugares como la Parroquia de San Miguel del Espíritu Santo, el Jardín Escultórico “Juan Soriano” o el Centro Cultural “Nogueras”, son algunos de los sitios a destacar, entre otros más. En el caso de este último mencionado, cuenta con un museo con obras del artista Alejandro Rangel Hidalgo, al igual que exhibe algunas piezas prehispánicas de la zona. 

Por motivos de seguridad, las autoridades mantienen vigilancia constante en el cercano poblado de “La Yerbabuena”, a tan sólo 8 kilómetros del volcán, siendo de acceso restringido a causa del peligro que supone su estado de actividad. No obstante, los turistas que acuden recorren la zona mediante tours, bajo la supervisión de vulcanólogos, manteniendo una selección de puntos estratégicos cercanos al pico. 

Cerca de Comala está Suchitlán, pueblo de ascendencia nahua, que tiene la particularidad de contar con excelentes artesanos que se dedican a la fabricación y diseño de máscaras de madera, las cuales encarnan a figuras representativas de su cultura, así como a diversos animales. Las máscaras son empleadas durante las festividades regionales del 03 de mayo. 

Comala también es reconocida como la puerta de la Ruta del Café, la cual se extiende por diferentes localidades del municipio, siendo garantía de un producto de calidad que la distingue en la región. Debido a las condiciones de la zona, durante el siglo XIX el empresario alemán y cónsul honorario del país teutón, de nombre Arnold Vogel, fundó la primera hacienda cafetalera del Estado de Colima. Con el paso del tiempo, esta Hacienda pasó de ser un recinto cafetalero a un conocido hotel de lujo. 

No cabe duda, que el visitar la tierra de los volcanes es más que estar cerca del “fuego”, dada la diversidad de actividades, la buena comida y el ambiente, que hacen de Comala un sitio privilegiado para la aventura. 

 

“El conocimiento habla
y la sabiduría escucha”
(Jimi Hendrix, 1942-1970).